Un grupo de investigadores de la Universidad de Arkansas de Little Rock sostienen haber descubierto un proceso nanotecnológico sumamente prometedor a la hora de aumentar la eficiencia de la energía solar usada la producción de hidrógeno en las células de combustible.
El hidrógeno es el tercer elemento más abundante sobre la faz de la Tierra y es reconocido por muchos científicos como el candidato ideal para sustituir en el futuro el uso de combustibles fósiles.
El hidrogeno se genera a través del proceso de electrólisis, proceso que requiere energía. Actualmente el 95 por ciento del hidrógeno que se genera produce dióxido de carbono debido a que se utilizan hidrocarburos como la fuente de energía para su producción.
Reconocido el potencial del hidrógeno la tarea que se plantean ahora los investigadores es como obtener hidrógeno a través de la utilización energías renovables evitando la contaminación al medio ambiente.
Imagen de Nanotubos de carbono por Wikipedia
La energía solar se presenta como una buena fuente de energía para la generación de hidrógeno, ya por 1970 investigadores japoneses descubrieron que que algunos materiales semiconductores podía captar los rayos sol y usarlos para separar la molécula de agua, obteniendo el hidrogeno de la misma. El problema resulto ser que el proceso no era lo suficientemente eficiente como para ser un método viable de producción de hidrógeno.
Pero los científicos no abandonaron la idea y siguieron trabajando en la utilización de la energía solar para la producción de hidrógeno, especialmente utilizando como material el titanio.
Un aumento de eficiencia de la energía solar es precisamente lo que lograron los científicos de Arkansas, pues lograron aumentar la eficiencia de los photoanodos del titanio con moldeándolos en estructuras nanotubulares. Una vez dada al plasma del material esta forma, la eficiencia del proceso aumento en un 80%.
Fuente: erenovable
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